
Autor(es): Steffen Benndorf
Año: 2012
Editorial: Morapiaf
Jugadores: 2-5
Duración: 30min
Dificultad: Muy fácil
Tipo de juego: Party / Familiar
Maldito bingo, nunca me olvidaré la de tardes que me hizo pasar mi abuela jugando al bingo con una baraja española de cartas. No recuerdo haberme divertido, aunque tampoco haberme aburrido. La verdad es que tengo bastante mala memoria. Solo sé que a día de hoy el bingo no me gusta en absoluto, aunque entiendo la emoción de quien intenta cantarlo.
Pues aquí me tenéis reseñando el juego de nombre impronunciable que no resulta ser más que un bingo con dados con los cambios justos para añadirle elección y que el bingo tome otros colores para mí…
Pues lo dicho, Qwixx es un juego con mecánica de bingo para 2 a 5 jugadores donde cada uno dispone de una hoja con cuatro filas de números que iremos tachando en función de los dados. Pero el objetivo no es cantar linea sino conseguir el mayor número de puntos al finalizar la partida.
Componentes
Esta es la hoja que tendrá cada jugador, dividida en cuatro filas de colores. Al tachar un número de un color estamos evitando poder tachar los números que están a su izquierda. Es decir, que si por ejemplo tachamos el 6 rojo, ya no podríamos tachar del 2 al 5 rojo. Aquí es donde tenemos una de las elecciones de juego.
La parte baja de la hoja indica la forma de puntuación del juego: se puntúa por la cantidad de números tachados en cada una de las filas.

Tenemos seis dados; dos blancos y cuatro de colores.

Turno del jugador
Cada jugador tras lanzar los seis dados tiene la opción de tachar hasta dos números:
– Primero puede tachar un número en cualquier fila representado por la suma de los dos dados blancos cumpliendo la regla de no tachar un número a la izquierda de otro ya tachado. Además esta acción también pueden llevarla a cabo los jugadores que no están en turno, esto hace que todo jugador este siempre atento y pueda aprovechar el turno de los demás.
– El jugador activo puede tachar (igualmente con la regla de tachado) un segundo número utilizando un dado de color y uno blanco. Es decir, si utiliza el dado verde puede tachar el número que resulta de sumar el resultado del dado verde y uno de los blancos.
Si el jugador no tacha un número en ninguna de las dos acciones, porque no quiere o porque no puede, este se apuntará un fallo. Cuando un jugador tenga cinco fallos la partida finaliza. Cada fallo resta cinco puntos al final de la partida.
Además cuando un jugador tenga cinco números en la misma fila ya podrá tachar el número final (doses o doces) de esa fila, cerrando esa fila para todos los jugadores y obteniendo además un tachado extra. Si se cierran dos filas de números también se termina la partida. Al finalizar se calculan los puntos tal como se indicó anteriormente siguiendo las indicaciones en la hoja de cada jugador. El jugador con más puntos es el ganador!
Conclusiones
Pues como he comentado, con pequeños cambios a lo que podría ser un bingo sacando cartas o dados, gana un punto muy interesante para los jugadores teniendo que elegir qué números tachar y cuándo bloquear o esperar a una próxima oportunidad. El entreturno prácticamente no existe por tanto otro punto a favor. Un juego muy recomendable para jugar con niños, amigos, suegras… sin que nadie llegue a aburrirse y sin tener que devanarse los sesos. Un rato de lanzar dados y tachar números muy agradable.
Y yo que aún no lo he probao, con lo que me gusta tirar daditos xDD
Yo lo pude probar y… bueno. No me disgustó pero tampoco me volvió loco. Si este juego lo llega a sacar Knizia, lo llama «Keltis Wurfel» o algo así. Pero oye, no está mal para lo que es.